sábado, 1 de junio de 2013

Video Barcelona 4 - 1 Málaga



Un cuarto de hora necesitó el Barcelona para poner la Liga a cien. Un 3-0 en quince minutos que dejó KO a un Málaga indolente al que la temporada se le empezó a hacer demasiado larga desde su dolorosa eliminación en cuartos de final de la Liga de Campeones a manos del Borussia Dortmund. En la segunda parte, un gol por cada equipo dejaron un 4-1 que resultó definitivo.

Que el conjunto catalán igualara los cien puntos conseguidos por el Real Madrid la temporada pasada era el único aliciente deportivo de un encuentro con sabor a despedida.

Para el francés Eric Abidal, quien disputó sus últimos minutos como azulgrana, Manuel Pellegrini, que la próxima campaña entrenará al Manchester City, y probablemente para jugadores como Isco, Joaquín o Villa, quien quizá marcó esta tarde su último gol con la camiseta del Barça.

Resulta paradójico que el año en el que más se ha discutido el juego de los de Tito Vilanova, en el que se ha puesto por primera vez en duda su estilo y su hegemonía, en el que incluso se ha hablado de cambio de ciclo, el Barcelona haya hecho la mejor Liga de su historia, haya dejado al eterno rival quince puntos por detrás y haya firmado su mejor marca goleadora de siempre (115 tantos).

Con la Liga Europa ya asegurada y pendiente de si podrá disputarla o no por culpa de una sanción de la UEFA, el Málaga, en cambio, no se jugaba nada esta tarde y acudió como convidado de piedra a la fiesta del campeón, al menos durante la primera mitad.

Sin morder arriba, sin trabar con faltas el juego del rival, sin buscar la portería defendida hoy por Pinto, el conjunto andaluz solo amenazó a los locales una vez en todo el primer tiempo en una cabezazo desviado de Santa Cruz.

Al Barça le bastó mantener la posesión del balón y tres zarpazos en sus tres primeras llegadas -dos combinaciones entre líneas de Iniesta que aprovecharon Villa y Cesc y un derechazo cruzado de Montoya a la salida de un córner- para dejar el partido sentenciado en un cuarto de hora.

Cansado de regalar caramelos, Andrés Iniesta haría el cuarto a los siete minutos de la reanudación: una preciosa rosca desde la frontal que le confirmaría como el hombre del partido justo antes de ser sustituido por Thiago.

Pese a todo, el Málaga mejoró ostensiblemente en este segundo acto. Baptista y Morales, que sustituyó a Santa Cruz en el descanso, malograron dos mano a mano ante Pinto, Isco tiró desviado poco después y el propio Morales batiría por fin la meta azulgrana con una bonita volea a centro de Jesús Gámez
.

Con media ahora aun por jugarse y el partido totalmente sentenciado, Abidal salió a calentar. Rendirle tributo tras seis años de servicio al barcelonismo en los que ha superado un cáncer que le obligó a un trasplante de hígado era el único aliciente que le quedaba al encuentro. Y el '22' salió cuando quedaba un cuarto de hora, ante el deliro del Camp Nou.

El la recta final, Baptista puso a prueba a Pinto y Alexis y Pedro a Willy Caballero, antes de que Ayza Gámez señalara el final del partido. El colegiado valenciano también vivió hoy su particular homenaje, pues los jugadores de ambos equipos le regalaron un partido tan plácido que ni siquiera tuvo amonestaciones

No hay comentarios:

Publicar un comentario