El Málaga, intratable en la 'Champions' y clasificado con solvencia para octavos, parece encallar en la Liga BBVA al caer derrotado de nuevo en La Rosaleda, en este caso ante un rival más que necesitado como la Real Sociedad (1-2), que obtuvo su primera victoria de la temporada a domicilio.
El cuadro donostiarra sigue sin perder después de siete años en La Rosaleda ante un Málaga que acusó el cansancio de la Liga de Campeones, y cuando peor llegaba, con su entrenador, el francés Philippe Montanier, cuestionado.
El equipo malagueño regresaba a su feudo tras el fiasco de hace una semana ante el Rayo Vallecano y con la euforia de haber conseguido la clasificación para los octavos de final de la Liga de Campeones. Los aficionados estaban expectantes por ver qué Málaga se iba a presentar, si el del pasado sábado o el que maravilló en San Siro ante el Milan.
Por su parte, la Real Sociedad se presentaba de nuevo en la capital de la Costa del Sol con su entrenador en difícil situación y con numerosas bajas como las de los centrocampistas Antoine Griezmann y Markel Bergara.
Y con los aficionados todavía entrando en el campo, la Real Sociedad sorprendió al Málaga con una jugada por la banda izquierda llevada por el delantero uruguayo Ifrán, cuyo pase aprovecha en el área pequeña el mexicano Carlos Vela, para batir por bajo al meta argentino Caballero en el primer minuto de juego.
Al Málaga le pilló en el vestuario el gol, porque prácticamente ningún jugador llegó a tocar el balón por la rapidez que imprimió la Real Sociedad en la acción.
Tras la sorpresa, el equipo del chileno Manuel Pellegrini tomó el mando del partido e inicio el asedio a la portería de Zubikarai, aunque sin excesiva precisión.
La Real Sociedad, a medida que iban pasando los minutos, salía del asedio malaguista con presión en el centro del campo y rapidez por las bandas con sus estiletes Vela y Castro. El Málaga no terminaba de enlazar su juego de toque, el que tantos triunfos le había dado hasta estos momentos y sufría para llegar al área contraria.
El conjunto andaluz llevaba 36 minutos sin tirar a portería hasta que probó el centrocampista portugués Eliseu Pereira, pero su lanzamiento tocó en un contrario y se fue a córner. Tras ese saque de esquina, el argentino Javier Saviola aprovechó un mal despeje defensivo en el punto de penalti para empatar el partido en el minuto 37.
Pellegrini reestructuró nuevamente el once con la entrada del centrocampista chileno Manuel Iturra por el lateral derecho Gámez. Sergio Sánchez, ocupó su posición, Eliseu retrasó su lugar al lateral izquierdo, Portillo se fue a la banda derecha e Iturra junto con Toulalan, en el medio centro.
Algo más de vida le dio al Málaga, pero no dominaba. En una acción a la contra con más jugadores contrarios el central Onyewu se equivocó en el despeje y dejó el balón a los pies de Xavi Prieto, que sólo tuvo que empujarlo.
Difícil se le ponía la situación al Málaga, que acumulaba mucho cansancio ante un equipo muy peligroso, más fresco y con el marcador a favor.
Un disparo de Isco, pero con intervención de Zubikarai, fue lo más destacado de los malaguistas, que se aferraban una y otra vez en entrar con el balón hasta la portería ante una Real Sociedad cerrada que aseguró un triunfo muy importante y propinó otro disgusto liguero a los locales.
Malaga 1-2 Real Sociedad por fasthighlights-2013
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