El Sevilla desperdició la oportunidad de igualar a puntos con el Valencia en su pulso por la cuarta plaza, al empatar en su visita a un Granada que quiere aferrarse a sus opciones de salvación, en una jornada en la que el Villarreal no rompe su mala dinámica y ya suma seis sin vencer.
Tras la lucha por el título del sábado, marcada por el suspense en el Camp Nou y el Santiago Bernabéu, la jornada dominical dejó muestra de la agonía y la necesidad de los equipos que buscan a la desesperada puntos en sus luchas por la salvación. El final de la Liga se va atisbando y las urgencias convierten en los peores rivales a aquellos equipos que ocupan la zona baja de la clasificación.
Salvo el Almería, que regresó en Vallecas a esa imagen de indolencia que provocó la destitución de Juan Ignacio Martínez, el resto de integrantes de la zona de descenso lucharon hasta el último segundo por sumar un punto.
Lo consiguió el Granada, con su central Diego Mainz como protagonista en las dos porterías. Alimentó la esperanza de salvación con un testarazo a un saque de esquina pero cuando llegó la reacción del Sevilla, empujó a su propia portería un centro envenenado de Aleix Vidal (1-1).
Un triunfo en once jornadas no aleja al Granada de su objetivo. Está a tres puntos de la salvación y acabó dando por bueno el empate tras la reacción del Sevilla, que en esta ocasión no le condujo a la remontada por segunda ocasión en la semana, tras lograrlo en Liga Europa frente al Zenit.
Mantiene los once puntos de distancia con un Villarreal que ha perdido su pegada. Solo un tanto a favor en las seis últimas jornadas en las que no ha sumado un triunfo. Mas no pudo hacer para derrotar al Córdoba. Primero el travesaño, que repelió dos potentes disparos en el primer acto, y las continuas paradas del portero Juan Carlos Martín en el segundo provocaron el empate sin goles.
De poco le sirve el punto a un Córdoba que ya está obligado a sumar de tres en tres. Ve la salvación a ocho puntos de distancia a falta de seis jornadas para la conclusión del campeonato. Tras puntuar en sus dos últimas salidas necesita saborear un triunfo que no firma desde el 12 de enero.
No sale de la zona de descenso el Almería, que tenía la oportunidad de aprovechar la derrota del Deportivo de la Coruña ante el Atlético de Madrid, pero fue derrotado con claridad por un Rayo Vallecano que selló su permanencia en la Liga BBVA una temporada más (2-0).
El testarazo de Iván Amaya y el primer gol como rayista del venezolano Miku plasmaron en el marcador la superioridad del conjunto madrileño. Pese a levantarse del vapuleo recibido en Balaídos, Paco Jémez se marchó descontento. "Hemos perdido el balón con un nivel de Tercera División", dijo. Es su forma de alimentar el sueño europeo para que sus jugadores no se relajen.
Lo tiene también un Celta de Vigo que conquistó Ipurua con mucho oficio para sellar también su permanencia e impedir al Eibar dar el paso que necesita hacia la tranquilidad. Pudo vencer por mayor diferencia, pero le bastó un tanto de penalti de Nolito (1-0) para asaltar la novena plaza de la clasificación.
La trigésimo segunda jornada de la Liga BBVA se cerrará el lunes (20:45 horas), con el duelo entre Elche y Real Sociedad, en el que el conjunto alicantino tiene la oportunidad de dejar a nueve puntos los puestos de descenso frente a un rival que ya no se juega nada.
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