Málaga goleó al Racing de Santander (3-0), hundido y sin argumentos, en un partido plácido y tranquilo y escala hasta la tercera posición por primera vez en su historia, más cerca de su objetivo de disputar la próxima Liga de Campeones.
El equipo malagueño, tras la derrota de la pasada jornada contra el Betis, afrontaba el encuentro con incertidumbre, a pesar de la diferencia de clasificación con el Racing, penúltimo clasificado, y la racha negativa, doce jornadas sin ganar, del conjunto cántabro.
El Málaga salió muy concentrado, con rapidez y sin fisuras. El delantero venezolano José Salomón Rondón avisó con un lanzamiento y en el segundo ataque, el defensa Francis agarró a Rondón dentro del área. El árbitro Del Cerro Grande señaló penalti y expulsión del futbolista del Racing en el minuto 2.
Caorla fue el encargado de lanzar y Mario, el guardameta del Racing, le adivinó la intención desbaratando lo que hubiera supuesto el primer gol. El equipo malagueño no se descompuso, al revés atacó mucho más. Maresca, disparó al poste; Isco hizo lo mismo y paró Mario; Sebastián Fernández, también lanzó y el guardameta se erigió en el protagonista con otra intervención.
El gol tenía que llegar por las ocasiones del Málaga y fue Isco con un lanzamiento desde dentro del área grande el que adelantó a su equipo en el minuto 22. El encuentro era un monólogo. El Racing ni se acercaba a la portería defendida por Kameni.
El conjunto malagueño creaba muchas ocasiones con Isco, Sebastián Fernández, Cazorla y Rondón, y un juego rápido y dirigido Maresca con la ayuda de Demichelis, su protector en el centro del campo. El Racing intentaba salir de la presión malaguista con Stuani, sólo arriba y alguna ayuda por las bandas.
La superioridad numérica y de juego del Málaga no se vio traducida en más goles. Tras el descanso, la situación empeoró para el Racing, ya que su portero Mario se lesionó y debutó el canterano Sotres en el minuto 48.
Cazorla tuvo la ocasión más clara en una gran jugada de Isco, pero el internacional lo vio tan claro al no estar el portero en su sitio que disparó flojo y un defensa salvó en la línea de gol. El propio jugador enmendó su error en una jugada milimetrada cuyo balón cruzó a la salida de Sotres, en el minuto 67.
El partido prácticamente había finalizado con un Racing entregado y un Málaga que bajó el ritmo, pero que por su calidad llegaba una y otra vez a la portería de Sotres. Van Nistelrooy que había salido al terreno de juego consiguió con un certero cabezazo su gol número cincuenta en España.
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